Una banda armada abrió fuego dentro del Hospital Universitario de Mirebalais (HUM), Haití, en las primeras horas del 26 de septiembre, aterrorizando a los pacientes y al personal, y dejando las instalaciones, incluida la unidad de cuidados intensivos neonatales, llena de balas. Según los informes de los testigos, ningún personal ni paciente resultó herido en el ataque.
Sin embargo, aproximadamente el 50% de los pacientes del HUM huyeron de las instalaciones, incluidos aquellos críticamente enfermos, cuya salud podría deteriorarse sin acceso a una atención médica que les salve la vida. Nuestros colegas de Zanmi Lasante (ZL), como se conoce a Partners In Health (PIH) en Haití, están haciendo todo lo posible para proteger a los pacientes e intentar que regresen para recibir atención médica. ZL ha emitido la siguiente declaración en respuesta al ataque, que se produce después de meses de creciente violencia de pandillas en todo el país:
La dirección ejecutiva de Zanmi Lasante y el Hospital Universitario de Mirebalais (HUM) condenan enérgicamente el impactante ataque perpetrado por una banda contra el HUM, aproximadamente a las 2:30 a.m. de hoy. Este brutal ataque violó el acuerdo moral de que los hospitales son lugares de neutralidad, dejando profundamente traumatizados al personal médico y pacientes.
«Condenamos enérgicamente este ataque como una violación del principio de neutralidad médica protegido por el Derecho Internacional Humanitario», afirma Marc Julmisse, director ejecutivo interino de ZL. «A pesar de este ataque dirigido al HUM, el personal de Zanmi Lasante sigue comprometido a brindar atención vital al pueblo de Haití, y pedimos que se solidaricen con ellos».
El HUM es un símbolo de atención médica de calidad y un lugar de curación para la comunidad haitiana. Es donde se salvan vidas, donde se alivia el dolor y donde todos, sin importar sus circunstancias, encuentran ayuda en momentos de necesidad. Los hospitales son lugares neutrales, refugios donde todos pueden encontrar seguridad y atención, independientemente de sus orígenes o afiliaciones. Este ataque al HUM viola los principios esenciales de la neutralidad médica y ha dejado una profunda herida tanto en el personal del hospital como en los pacientes.
De los más de 350 pacientes presentes en el momento del ataque, muchos estaban en cuidados intensivos, en estado crítico. La unidad de cuidados intensivos neonatales del hospital, que alberga a recién nacidos frágiles y desamparados en incubadoras, también fue objeto de disparos, dañando varias de las incubadoras y poniendo en peligro a estos bebés de por sí ya vulnerables.
Aunque no hubo muertes ni heridos, este ataque resalta la urgencia de que las autoridades locales, los organismos encargados de hacer cumplir la ley y la comunidad internacional adopten medidas firmes para garantizar que los hospitales sigan siendo santuarios de atención médica. Los actos de violencia contra los centros de atención de salud no solo interrumpen la provisión vital de atención médica, sino que también causan un trauma perenne a quienes buscan y brindan atención.
Zanmi Lasante y el HUM siguen comprometidos con nuestra misión de brindar atención de calidad a los pacientes en Haití, independientemente de las dificultades que enfrentemos. Seguimos decididos a continuar nuestro trabajo, restaurar la neutralidad de los centros de atención médica y apoyar a nuestra comunidad en estos tiempos difíciles.
Nos solidarizamos con nuestro valiente y dedicado personal, nuestros pacientes y sus familias, y todos los afectados por este ataque. Juntos, más fuertes que nunca, estamos comprometidos con la curación, la compasión y la esperanza.
Lee la declaración original en inglés: https://www.pih.org/article/statement-armed-attack-hopital-universitaire-de-mirebalais-haiti