El Día Mundial de la Lucha contra el Sida, conmemorado cada 1 de diciembre, es un momento clave para reflexionar sobre los desafíos que enfrentan las personas que viven con VIH y las oportunidades para mejorar su calidad de vida. Entre los grupos más vulnerables está la población adolescente, que no solo enfrenta los cambios propios de la edad y el reto de la transición a la vida adulta, sino también el estigma asociado a su diagnóstico y las barreras del sistema para acceder a una atención integral.
En Perú, el panorama es preocupante. Según el Centro Nacional de Epidemiología, Prevención y Control de Enfermedades del Ministerio de Salud (MINSA), en 2023 se registraron 773 nuevos diagnósticos de VIH en adolescentes y jóvenes de 10 a 19 años. Esta cifra refleja la urgencia de implementar iniciativas que no solo garanticen acceso al tratamiento, sino que también brinden apoyo emocional y educativo a esta población.
Con esto en mente, Socios En Salud, a través de sus programas de VIH e Infecciones de Transmisión Sexual, y Salud Mental, ha desarrollado proyectos dirigidos para adolescentes con viven con VIH. Se tratan de iniciativas que abordan la brecha en el acceso a servicios, así como el estigma, para promover el autocuidado y la continuidad de los tratamientos.
A través de la sensibilización, Socios En Salud busca romper el estigma en torno el VIH entre la población adolescente.
Foto de SES
Un chatbot para adolescentes con VIH
Con financiamiento del Collaborative Initiative for Pediatric HIV Education and Research (CIPHER), el Programa de Salud Mental de Socios En Salud desarrolló a EVA, un chatbot especializado que busca educar sobre la depresión, brindar estrategias de autoayuda y facilitar la vinculación de adolescentes viviendo con VIH con especialistas cuando sea necesario.
En una prueba piloto realizada con 50 participantes de 10 a 19 años, EVA logró una aceptación del 96%. Las juventudes destacaron su utilidad como herramienta educativa, su facilidad de uso y su capacidad para abordar problemas emocionales de manera confidencial y segura.
Los resultados de esta herramienta dan cuenta de su capacidad para ofrecer apoyo inmediato. A través de un enfoque personalizado y adaptado a las necesidades locales, el proyecto apunta a contribuir a superar el estigma asociado a buscar ayuda para la salud mental.
Además, los resultados preliminares han sido compartidos en conferencias internacionales y publicaciones científicas, subrayando su relevancia como modelo innovador que podría ser replicado en otros países.
El proyecto también explora cómo integrar herramientas tecnológicas como EVA en sistemas de salud más amplios, con el objetivo de crear un enfoque sostenible y escalable que beneficie a más adolescentes en el futuro.
En una prueba piloto realizada con 50 participantes de 10 a 19 años, el chatbot EVA desarrollado por el proyecto CIPHER, del Programa de Salud Mental, logró una aceptación del 96%.
PASEO: más allá del tratamiento médico
El proyecto PASEO, del Programa de VIH e ITS de Socios En Salud, aborda otro aspecto fundamental: la adherencia al tratamiento, es decir, el cumplimiento adecuado y constante de un régimen médico prescrito. Financiado por los Institutos de Salud de Estados Unidos, PASEO se trata de un ensayo clínico aleatorizado que busca determinar si una intervención integral que incluye acompañamiento emocional, educativo y social mejora significativamente la continuidad del tratamiento en adolescentes y jóvenes de 14 a 24 años que viven con VIH.
Con 160 participantes divididos en dos grupos, PASEO compara los resultados de quienes reciben atención rutinaria en el sistema público y quienes, además, reciben esta intervención personalizada. Actualmente, 80 adolescentes de 4 hospitales y 6 centros de salud del Ministerio de Salud están recibiendo este acompañamiento, y los resultados preliminares estarán disponibles en un año.
“La importancia de este proyecto radica en demostrar que la combinación de atención médica y un soporte ampliado y diferenciado para esta población puede marcar una diferencia significativa en la vida de los adolescentes y jóvenes con VIH, y servir como modelo para escalarse a nivel local o incluso replicarse en otros contextos”, comenta al respecto Renato Errea, jefe del Programa de VIH e ITS de Socios En Salud.
Hablar sobre prevención de VIH en adolescentes es clave para educar, reducir riesgos y construir un futuro más saludable.
Foto de SES
DiME: redes sociales contra el estigma
El estigma sigue siendo una de las principales barreras para la inclusión y el bienestar de las personas viviendo con VIH. El proyecto DiME, financiado por el Instituto de Salud Mental de Estados Unidos e implementado por el Programa de VIH e ITS, aprovecha el alcance y la influencia de las redes sociales, como TikTok e Instagram, para combatir tanto el estigma externo como el autoestigma relacionado al VIH
El contenido, desarrollado tras un análisis de grupos focales y entrevistas con más de 113 participantes incluidos adolescentes y jóvenes de 16 a 29 años viviendo con VIH, aborda temas claves sugeridos por esta población y es difundido con el apoyo de una agencia de marketing y con participación de influencers . Aunque el impacto del proyecto aún se está midiendo, los resultados iniciales son alentadores: la cuenta de TikTok ha superado los 10,000 seguidores, reflejando un alto nivel de interés y participación.
DiME subraya cómo las plataformas digitales pueden ser una herramienta poderosa para educar y transformar percepciones, empoderando a los jóvenes con VIH y promoviendo una sociedad más inclusiva.
Así, a través de estas tres iniciativas, Socios En Salud reafirma su compromiso con los adolescentes que viven con VIH, destacando la importancia de la innovación, el acompañamiento y la educación para construir un futuro más equitativo y lleno de oportunidades.
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