Este 24 de marzo se conmemora el Día Mundial de la Tuberculosis (TB). Una fecha que en Socios En Salud (SES) nos permite reafirmar nuestro compromiso con la investigación y la innovación médica en el hallazgo de soluciones que contribuyan a marcar un final a esta enfermedad, capaz de producir alrededor de 52 mil casos al año en Perú.
En pleno siglo XXI, resulta increíble que una de las infecciones más antiguas de la humanidad no cuente con herramientas efectivas y suficientes para enfrentarla. Sobre la TB, además, se tejen diversos tabúes que deben combatirse mediante una serie de acciones que integren campos como el cuidado de salud, la abogacía, entre otros.
Uno de estos frentes es la investigación. Sin embargo, el panorama no parece tan optimista para su desarrollo. Los recursos y el interés global por investigar la TB siguen siendo limitados. Por ejemplo, la única vacuna disponible —llamada BCG— tiene más de cien años y sigue utilizándose ante la falta de nuevas alternativas.
Frente a ese contexto, para nosotros realizar investigaciones en torno a la TB es un compromiso moral, además de uno de los pilares de nuestro trabajo. Tenemos como misión acercar la ciencia moderna a las comunidades más pobres y desfavorecidas para aliviar, en parte, el sufrimiento de las familias que padecen esta infección.
“EndTB” y “Estudio EPI”, dos estudios de alto impacto
Actualmente, una de las investigaciones más influyentes contra la TB es la denominada “EndTB”. Un consorcio liderado por Partners In Health (PIH), Médicos Sin Fronteras e Interactive Research and Development, que en los últimos siete años desarrolló un ensayo clínico de cinco brazos de esquemas para reducir la duración del tratamiento de tuberculosis.
Tres de los cinco brazos evaluados en este ensayo lograron efectividad y acortar el tratamiento para la TB mulidrogorresistente (TB-MDR): una terapia totalmente oral, libre de inyecciones, que dura solo nueve meses. Los resultados de altas tasas de curación (>90%) se presentaron en la última edición de la Conferencia Mundial de La Unión sobre Salud Pulmonar, realizada en París (Francia), en octubre de 2023.
Un dato no menor es que casi 40% de participantes incluidos en este estudio fueron de nacionalidad peruana. Es decir, ya contamos con evidencia nacional para su implementación. Por ello, se tiene previsto que los resultados del “EndTB” sirva como evidencia para la actualización de la guía técnica nacional de TB, así como para las guías mundiales de TB resistente.
En la última edición de la Conferencia Mundial de La Unión sobre Salud Pulmonar se presentaron los resultados del «EndTB»: un tratamiento totalmente oral para la TB-MDR, que dura solo nueve meses.
Por otro lado, en Socios En Salud formamos parte de importantes redes de investigación globales en TB. Así, entre 2009 y 2017, colaboramos con colegas de la Universidad de Harvard para desarrollar el “Estudio EPI”, una de las más grandes investigaciones prospectivas de TB en el mundo. A lo largo de varios años, con la colaboración de más de 100 establecimientos de salud del Ministerio de Salud (MINSA), seguimos a más de 18,000 personas (entre pacientes con TB y sus contactos domiciliarios), residentes en más de 25 distritos de Lima. Nuestro propósito era entender la dinámica de la transmisión de la TB y la TB-MDR en la comunidad.
Gracias al “Estudio EPI” conseguimos recolectar datos y muestras que continúan ayudándonos a desarrollar estudios innovadores que sean capaces de identificar nuevas estrategias de intervención para enfrentar la TB.
Un camino de perseverancia
Es muy importante que todos y todas comprendamos la importancia de desarrollar investigaciones en el campo de la salud. Como hemos podido observar líneas arriba, estas nos traen maravillosas oportunidades de resolver diversos problemas sanitarios.
Ciertamente, se necesitan mayores recursos e inversiones para esta tarea, como es el caso de la TB, pero también requerimos mejorar el marco regulatorio nacional para permitir que más profesionales peruanos se dediquen a la investigación.
Desde Socios En Salud, alentamos a las instituciones y universidades peruanas a propiciar este tipo de ambiente, pues solo así avanzaremos como país y aliviaremos el sufrimiento de las personas que tuvieron la mala fortuna de cruzarse con enfermedades como la tuberculosis.
No es un pendiente fácil, pero ya hemos visto que es posible. Es un camino de perseverancia y esperanza.